The Wrestler

Dir. Darren Aronfsky

Recuerdo que a un primo miembro del club de los no son guapos le decian otros primos unicamente guapos del ego, el Miqui Rurq; cuando descubri la crueldad del apodo fue cuando vi (a escondidas claro) Nueve semanas y media con Mickey Rourke y Kim Basinger.

Luego vi otras pelis bastante chafas de este actor, una llamada las Aventuras de Marlboro Man y Harley Davison, ¡vaya aventura americana!, los criticos de cine homosexuales se desviven en alabar su capacidad histrionica y llevarla a la par de la belleza que poseia, con falta de objetividad a mi parecer lo quieren volver leyenda nadamas porque es galan.

Por estos criticos sabemos que dejo la actuación en un arranque de vanidad y fue a meterse al box profesional donde le quitaron las ganas y lo galan, despues de varias cirugias quedo, que ni mandado a hacer, listo para Sin City de Frank Miller y Robert Rodriguez haciendola de Marv, un hombre que a pesar de sus limitadas capacidades mentales tiene una gran ventaja sobre sus enemigos por su fuerza y tamaño.

Darren Aronofsky que hizo: Pí fe en el caos o como le pusieron aqui: El orden del caos y la alucinante The Font o la pacheca y rechinante Requiem for a dream, que siempre en sus pelis recurrio al estilizado lenguaje visual para acompañar la narración, trae esta vez una historia lineal alejandose de lo que habia hecho antes hace esta pelicula de formato mas tradicional, sin su acostumbrada elegancia visual y con una historia que parece canción de Bruce Springsten. (de hecho sale al final una rola del Jefe)

The Wrestler o El Luchador es una historia de la epoca en que la WWW inventaba sus castigos sadicos en el ring y tenia idolos que hacian el circo en el regimen de Reagan antes de que llegaran los farsantes metrosexuales de Jonh Cena y Randy Orton o el ladino Rey Misterio. Una epoca donde Randy The Ram (Mickey Rourke) paso sus años de gloria en el pancrasio y trabajador de carnicerias con luchas eventuales y eso si, el respeto de los jovenes luchadores, su nostalgia y errores del pasado que debe uno adivinar y suponer lo hacen volver al ring a pesar del marcapasos y su endeble salud, y es que el ring es la unica familia que tiene el luchador y le da lo que la enamorada teibolera y la hija que lo odia y el patron que lo humilla no pueden darle, respeto.

Uno pudiera decir los gringos tambien lloran pero no se refiere esta pelicula a los gringos de las pelis de Disney sino a los de abajo, a los que no se sienten representados por los burgeses republicanos y aun asi tienen la bandera confederada en su trocka, a los que en secreto votaron por Obama por temor al prejuicio de los prejuiciosos de la derecha, mas aun a aquellos que como boxeadores mexicanos fueron sacados en hombros de las mejores arenas de Las Vegas y ahora son sacados a empujones de los bares de mala muerte, una historia de los que quieren componer su propio final a pesar de una sociedad que esta diseñada para aclamar y desechar idolos.

Mickey Rourke ya se llevo un premio de actuación por esto en Venecia los fans dicen que le daran el oscar que todos quieren, creo que en esta peli el sale de el mismo, de vivir en la nostalgia de lo que fue Randy The Ram y en lo que queda de el, Mickey Rourke. Incluso en los dialogos es claro que se refiere a el, en una escena final dice al publico: Es cierto que ya no soy lindo como antes, pero aqui estoy dando todo por ustedes. Luego un romantico e inesperado final.

Darren Aronofsky hizo una buena peli, aunque parece que no es de el por el tipo de cine que acostumbraba hacer, Mickey Rourke se la saco por que sale de el mismo y de lo mejor de esta peli es Marisa Tomei como la teibolera, el soundtrack de la peli tiene rolas de heavy metal y rocanrroll de los 80´s viejitas pero bonitas, al final el Jefe Springsteen se echa una rola, asi va con esta peli de superación personal accidentada con un final no tan de excelencia para el luchador.

Nota: a los luchadores y fanaticos no les agradara descubrir que se balconean los trucos y arreglos de este espectaculo.